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| Ciudad al desnudo, que los desnuda a ellos. |
El joven
recapturado, Carlos Junior Santana
Anchundia, viste campera deportiva con la inscripción LA (Los Ángeles), y
gorro con NY (New York). Es mostrado en Canal Uno, esposado,
rodeado de más de 10 policías uniformados y de civil, y un pelotón de reporteros.
El recorrido desde un edificio, en un ascensor y finalmente en un vehículo, fue repetido hasta el hartazgo, mientras tres ‘presentadores’ ‘conductores’ (?), Steeven Macías, Verónica Landetta (foto), y Ma. Fernanda Albornoz, estuvieron simultáneamente en pantalla, opinando, criticando y juzgando, sin mucho criterio, y con poco dominio del idioma español, tan rico en palabras, muchas mal pronunciadas.
El recorrido desde un edificio, en un ascensor y finalmente en un vehículo, fue repetido hasta el hartazgo, mientras tres ‘presentadores’ ‘conductores’ (?), Steeven Macías, Verónica Landetta (foto), y Ma. Fernanda Albornoz, estuvieron simultáneamente en pantalla, opinando, criticando y juzgando, sin mucho criterio, y con poco dominio del idioma español, tan rico en palabras, muchas mal pronunciadas.
Por lo poco que dijo Tierrita, acosado por los reporteros, se puede concluir que algunos guardias de la
cárcel facilitaron su fuga, y lo otro, que perfectamente Tierrita con su limitado vocabulario, podría estar
presentando el espacio ‘informativo’, hablando del desempeño de los
conductores.
Es cierto, Carlos Junior, alias ‘Tierrita’ se fugó del Centro de Privación de Libertad Regional 8 en Guayaquil, donde cumplía condena por un doble homicidio en 2009. Pero, les confieso que esa parafernalia policial y mediática, al estilo mafioso de Al Capone o de Lee Harvey Oswald, acusado de matar al presidente Kennedy en EE.UU. nos haga algún aporte, más que alimentar el ego de ese pobre muchacho descarriado, y sin ninguna posibilidad de reencauzarse en esta sociedad.
Es cierto, Carlos Junior, alias ‘Tierrita’ se fugó del Centro de Privación de Libertad Regional 8 en Guayaquil, donde cumplía condena por un doble homicidio en 2009. Pero, les confieso que esa parafernalia policial y mediática, al estilo mafioso de Al Capone o de Lee Harvey Oswald, acusado de matar al presidente Kennedy en EE.UU. nos haga algún aporte, más que alimentar el ego de ese pobre muchacho descarriado, y sin ninguna posibilidad de reencauzarse en esta sociedad.
Es aún más curioso que, Verónica Landetta invitó a 'reflexionar' en su Twitter, con la frase de de Jean Cocteau: "No se
debe confundir la verdad con la opinión de la mayoría".
