Ramón Méndez iba a prisión, pero el escáner corporal reveló algo inusual. Según informó el ministerio del Interior de Uruguay, “en la foto puede verse claramente que se trataba de una llave de esposas que el individuo se
tragó con la finalidad de expulsarla en algún momento y tenerla en su
poder”.
El escáner también “detecta distintas sustancias prohibidas”. Funciona hace más de un año en el Instituto Nacional de Rehabilitación, en dos unidades del Penal de Libertad, anacrónico nombre puesto durante la dictadura militar (1976-84).
Las autoridades, explicaronque “esta tecnología de punta hace parte importante al nuevo modelo de gestión penitenciaria, que abandona las revisorías invasivas por estas herramientas que dignifican a la persona y humanizan el tratamiento hacia los internos y sus familiares”.
El escáner también “detecta distintas sustancias prohibidas”. Funciona hace más de un año en el Instituto Nacional de Rehabilitación, en dos unidades del Penal de Libertad, anacrónico nombre puesto durante la dictadura militar (1976-84).
Las autoridades, explicaronque “esta tecnología de punta hace parte importante al nuevo modelo de gestión penitenciaria, que abandona las revisorías invasivas por estas herramientas que dignifican a la persona y humanizan el tratamiento hacia los internos y sus familiares”.