Hoy es sábado, estamos más relajados. Hagamos unas operaciones básicas: 450 sabatinas, a tres horas cada una, da 1350 horas. Eso equivale a 56,25 días
hablando sin parar. ¡Dos meses! Como si empezaras a leerme ahora, y lo hicieras sin parar hasta mediados de enero del próximo año 2016. Debería escribir muy bien para lograr captar tu atención ¿no te parece?Y eso, sin contar todas las otras
declaraciones, con medios de comunicación, inauguraciones, debates, mítines
políticos, cumbres, y saludos –partidarios y oficiales- desde el balcón de
Carondolet...
¿Se imaginan esa cantidad de horas en TV y radio para difundir programas de interés, con profesionales que lo hagan bien? Sólo eso, sin tener en cuenta los millones de dólares del gasto en tiempo de trabajo, las contrataciones -camarógrafos, sonidistas, editores, locutores, actores, humoristas, traductores-, producciones, viajes del material, profesionales y gente que aplauda.
Por eso a la invitación: “Enlace Ciudadano 450 con el Presidente Rafael Correa, en Quito, Pichincha, sábado 14 a las 10h00, ¡te esperamos!”, les respondo: lamento comunicarles que no iré. Muchas gracias. Ni lo veré por TV o escucharé por radio. En verdad tengo otras cosas que hacer.
¿Saben en el Récords Guinnes que estamos ante una marca mundial de este fenómeno comunicativo? Ah no, Venezuela nos supera.
¿Se imaginan esa cantidad de horas en TV y radio para difundir programas de interés, con profesionales que lo hagan bien? Sólo eso, sin tener en cuenta los millones de dólares del gasto en tiempo de trabajo, las contrataciones -camarógrafos, sonidistas, editores, locutores, actores, humoristas, traductores-, producciones, viajes del material, profesionales y gente que aplauda.
Por eso a la invitación: “Enlace Ciudadano 450 con el Presidente Rafael Correa, en Quito, Pichincha, sábado 14 a las 10h00, ¡te esperamos!”, les respondo: lamento comunicarles que no iré. Muchas gracias. Ni lo veré por TV o escucharé por radio. En verdad tengo otras cosas que hacer.
¿Saben en el Récords Guinnes que estamos ante una marca mundial de este fenómeno comunicativo? Ah no, Venezuela nos supera.