Cartagena; entre la cumbre y el llano

Patrimonio histórico (foto propia).

Es cosa de locos, pero Cartagena de Indias, la ciudad amurallada, ahora está bajo sitio.
La custodian por aire, tierra y mar. 33 mandatarios estarán bajo la mirada en directo, o por miles de pantallas de 32 agencias de seguridad internacional, contra amenazas terroristas y posibles disturbios, entre algunas opciones paranoicas de los poderosos. Sí, esos mismos que para llegar al poder, abrazaban y apretaban manos a todos los que los llevaron al aislamiento en el que ahora están, por miedo a que algunos de ellos, traicionado por sus promesas, busque venganza.
Algunas cifras; 14.000 militares, 5.000 policías, otros mil de un escuadrón especial, aviones y helicópteros, submarinos y hombres rana, robots antiexplosivos y un grupo anti armas nucleares, cuidarán a los gobernantes. Solo en el caso de Barak Obama, tendrá a su disposición el hotel Hilton completo, con sus 341 habitaciones. Si sumáramos el costo de cada una, el total resulta hasta obsceno.

Patrimonio real (foto propia).

En contraste
A pocas cuadras del centro histórico está el barrio Getsemaní, famoso por los relatos del Nobel colombiano Gabriel García Márquez. Hace algunos años, caminando por allí, una niña me dijo, ¿te la chupo por 10.000? (4 dólares). Luego, un adolescente, me dijo que esa niña tenía Sida. Seguramente ya no vive para ver este despliegue capitalista apocalíptico. 

…se metieron disfrazados durante el carnaval de noviembre en los cuartos de alquiler del antiguo barrio de esclavos de Getsemaní, al amparo de las mamasantas que hasta hacía pocos meses tenían que padecer a Billy Sánchez con su pandilla de cadeneros.
El rastro de tu sangre en la nieve. Gabriel García Márquez.